sábado, 28 de septiembre de 2013

Volando a casa.

Nunca he entendido porque tengo miedo a volar, la verdad es que cuando me encuentro en el aeropuerto, siempre estoy en la nervia total, sobre todo que me encanta las películas de acción donde siempre hay aviónazos, pero ahí me tienen mordiendome las uñas mirando estas películas.

Todo surge cuando me encontraba viviendo en Baja California Sur, de esas veces que estas en casa apurando te porque se te hizo tarde para ir al hospital (era un simple Médico Interno de pregrado) se me hizo tardisimo, todos mis compañeros ya se encontraban en el hospital, cuando en eso prendo la TV y estaba al aire el noticiero, anunciando un evento sin precedentes que estaba sucediendo en Estados Unidos, el incendio de las Torres Gemelas de Nueva York, que a los pocos minutos esto se transformo en un acto suicida por grupos extremistas musulmanes...

Aún recuerdo cuando te subías a un avión casi a los 5 minutos, corriendo con las maletas, corriendo en medio de la pista y aventando en el carrito maletero tus pertenencias, ver la cara de todas las personas que, por tu culpa se estaba atrasando el vuelo, era maravillosos esos años de ser impuntuales e irresponsables en los vuelos aéreos...

Aunque debo reconocer que gracias a aquella desgracia, ahora ya tenemos reglas y leyes que se tienen que seguir al pie de la letra y que nos brindan mayor seguridad y protección para ser felices 

No se cómo quitarme siempre estos nervios, los cuales se agudizan cuando ya estoy sentado y se prendé el foquito de "abrocharse el cinturón" en ese momento mi corazón comienza a latir, pero, casi a punto de explotar cuando la nave comienza a tomar velocidad para alzar el vuelo... No no no, si la persona que está a mi lado tiene en ese momento su mano, soy capaz de despedazarle su miembro pélvico al sentirme más asustado de lo que ya estoy...

Pero bueno, esa es una de las experiencias que en este momento voy a vivir como siempre, la verdad no es de mi agrado volar, pero lo hago por razón necesaria y por que tengo que ver a mi familia, porque urge ver a mami, a papi y a mis hermanas, así como a mis hermosos sobrinos... Ni modo, todo sea por ser feliz...

Ya están llamando a que nos presentemos en la puerta A2... Ya mi corazón comienza a latir, mis glándulas sudorípara ya están a mil y yo... Muero lentamente...

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